En algún lugar del mundo...

En dónde estoy?, con quién estoy?... Eso no importa, pasa que me encuentro sola, con gente extraña pero buena; cómo llegue aquí? pudo ser el destino que así lo tenía planeado o simple casualidad, movimiento brusco de las decisiones propias...
Existen seres humanos que normalmente no se sienten bien cuando están solos, soy uno de esos seres humanos o lo era?... No lo se, solo se que he aprendido a convivir con lo que soy, que he conocido fases de mi que no sabia que tenía.
Con calma le pongo atención a mi sentir, mi pensar, me concentro en lo que estoy viviendo y trato de tomar la mejor fotografía mental del momento; es un viaje que quiero recordar, con todo lo que hasta ahora aprendí, cada día, cada lugar, cada momento para reflexionar, cada platica con otras personas, con gente desconocida que te enseña tanto y lo más importante, que soy feliz con lo que soy, con lo que tengo, un montón de sueños por cumplir, metas por alcanzar.
Hasta cierto punto, la soledad es buena compañera, te ayuda a valorar todo aquello que por comodidad olvidas; se puede tener mucho o poco, pero mientras sea lo que te hace feliz hay que disfrutarlo.
No digo que ya termine de conocerme, pero al menos estoy segura de lo que soy y tengo una mejor perspectiva de mi vida, de la vida misma... La soledad ya no es un obstáculo ni un tormento, al contrario, es una excelente compañía, que en ocasiones te hace sentirte vivo y sentir que todo lo que has hecho hasta hoy a valido la pena.